Translate

martes, 25 de septiembre de 2012

Hace tiempo que no escribo en el blog.
Supongo que no he estado demasiado inspirada para compartir con vosotros todo lo que me ha ido sucediendo en estos últimos meses.

Ahora que llega el otoño, el cambio tan drástico de temperatura, la lluvia, nos volvemos todos un poquito más sensibles y nostálgicos; sobretodo si el verano ha dado frutos y experiencias nuevas y bonitas.

Esta ciudad, en la que el sol cada vez tarde más en salir y menos en esconderse, se torna triste, fría. Los amigos se van y algunos, los que nos quedamos, seguiremos jugando a algo que no existe.

Los sueños que provocó el verano de repente se evaporan. Una ráfaga de brisa fría me sirve para darme cuenta de que lo vivido terminó y que ahora toca sacar la ropa de abrigo, los libros y desatar del corazón tantas cosas que ya finalizaron para dar paso a la realidad. De nuevo.

...